El internet "social" debe morir

20 January, 2023

En los últimos años, las redes sociales se han convertido en una parte integral de nuestra vida diaria. Sin embargo, detrás de la fachada de conectividad y entretenimiento, se esconde una triste realidad:

Las cosas como son. Lo que a principios de los 2000s era la "autopista de la información" (joder, qué viejo me siento diciendo eso... son ya más de 20 años!) se ha convertido en una cloaca de odio, desinformación y feudos digitales que impiden la innovación. Es simplemente una masa de conocimiento guiada de manera interesada a los beneficios de unos pocos, mientras muchos viven abstraídos de que el coste de "lo gratuito" en la red es más elevado del que se piensan.

¿Qué te has fumado, Cristo?

Nada (solo voy por mi sexto café del día... una noche larga, creo). La verdad es que este post lo he atrasado desde hace más de 3 meses (lo tenía en mi borrador de Joplin), pero los últimos cambios de mando en la red (básicamente el relevo de Musk por Zuckerberg) me han hecho quitarle el polvo, darle una repasadita (rápida) por el corrector ortográfico y ponerlo al alcance de los MUY pocos seguidores que recibirán la notificación de este post en mis redes.

El internet de la "libertad"

En primer lugar, es importante entender que existe una diferencia entre libertad de expresión y libertad de opinión en internet. Mientras que la primera nos permite expresar nuestras ideas, pensamientos y acciones, la segunda implica tener la libertad de opinar sin consecuencias. En la práctica, esto significa que, aunque podamos expresar nuestras ideas libremente en internet, nuestras opiniones pueden tener consecuencias, como ser bloqueados o censurados por las redes sociales.

La libertad de expresión abarca desde nuestras frases de cuñado de turno, pasando por este post y por todo aquel contenido digital que muestre las ideas, pensamientos y acciones de una persona o colectivo. Mires como lo mires, si yo pinto un meme con el Paint, un artista crea un cuadro sobre un paisaje contaminado, o un veinteañero crea un curso de libertad financiera basado en criptomonedas... todo ello entra en lo que se considera libertad de expresión. Y dicha libertad de expresión se refleja en las obras, independientemente del formato. Por lo tanto, podríamos decir que realmente la libertad de expresión es la misma que hay en la vida real, fuera de las pantallas, ¿verdad? Ahora bien, la diferencia está en el momento que dicha libertad de expresión afecta a la libertad de expresión de otro individuo/sociedad. Dicha libertad incluye una serie de responsabilidades que todos hemos aceptado al vivir en una sociedad (vease lo que es una ley, básicamente). Por tanto, si mi obra/acción se basa en coartar, intimidar, reducir la libertad de otra persona u organismo, tiene todas las papeletas de que alguna legislación le dé un toque o directamente la detenga, pues evidentemente un estado garantista de los derechos y libertades individuales jamás permite que nadie "aplaste" con su libertad a otro.

¿Pasa esto en internet? Pues a medias.

No es lo mismo que una persona presente físicamente su opinión, idea o obra en un lugar y que otras personas, también físicamente, lo presencien, que un nick con una foto haga lo mismo en una red llena de más nicks que tampoco sabes a ciencia cierta si están presentes en el mismo territorio donde el primer sujeto se expresa... y este es el primer gran problema que convierte a internet en un zombi: ¿cómo vamos a validar la libertad de alguien si no sabemos simplemente si cumple la legislación que le corresponde (en algunos países puedes negar el Holocausto, pero prueba a hacerlo en Alemania chato, a ver qué pasa)? ¿Es legítimo que la libertad de expresión sea defendida al 100% en la red? ROTUNDAMENTE SÍ.

Pero esa defensa tiene un pequeño disclaimer: cuando tú publicas algo en la red, no lo haces como un conjunto de paquete de datos sobre un protocolo de red, realmente lo que haces es usar un proveedor de servicios para conectarte, otro para almacenar dicho contenido, y otro para publicarlo y difundirlo (para este ejemplo pongo que todos son diferentes, pero realmente podrían ser el mismo... tristemente). Con todos estos actores que intervienen... ¿qué deberíamos hacer cuando alguien abusa de su libertad de expresión? ¿Son ellos responsables de lo que esta persona haga? ¿Deben ser ellos los que tomen medidas? Para responder a estas preguntas tenemos que dejar de hablar de la libertad de expresión y movernos a la libertad de opinión.

Pues sí, efectivamente todas estas cosas las puedes hacer en la vida real (siempre que vivas en un estado democrático), no habrá nadie que te censure antes de publicar tu obra, contenido o idea.

El internet de las GAFM

Además, las grandes empresas de redes sociales, como Facebook o Google, tienen un gran poder sobre lo que se ve y se comparte en internet. Estas empresas, conocidas como GAFM (Google, Amazon, Facebook y Microsoft), tienen un gran monopolio en el mercado, lo que les permite controlar gran parte de lo que vemos en línea. Esto significa que hay poco margen de maniobra para innovaciones y nuevos competidores.

Parece que existe ya una (o varias) generaciones de personas que no recuerdan el internet previo a las redes sociales modernas (facebook, instagram, twitter, whatsapp, etc). Pero ese internet funcionaba!, y era muy activo en debates y en permitir opinar. Pero también tenia unos principios que todos tenian que adherirse para poder expresar sus opiniones:

Si este interenet se hubiese mantenido, estoy seguro que muchos problemas de hoy no existirían... pero tristemente llegó el modelo del marketing capitalista a intoxicarlo todo, y el tráfico empezó a importar mas que el contenido, con lo que los usuarios tenian que acostumbrarse mas a ver publicidad por todo lado e interactuar con cuentas que intoxicaban porque los moderadores iban desapareciendo o debajan de moderar (porque los administradores veían que la cuenta del banco se llenaba mas rápido así).

Y asi, con ese modelo nefasto, las buenas ideas iniciales de facebook, instagram y twitter, se convirtieron en la basura tóxica que son ahora. Y durante 2009-2011 hubo personas y colectivos que advirtieron de este problema de dejar en manos de unos pocos administradores el control sobre una vasta cantidad de usuarios, ya que si en lugar de moderar a los tóxicos, moderaban a los que criticaban el sistema, la censura hace acto de presencia de una forma tan sutil y asqueroza que nadie es capaz de verla como ilegítima.

La situación se agrava aún más con la aparición de lo que se conoce como "dark ux", una técnica utilizada por algunas redes sociales para manipular a los usuarios y mantenerlos en línea por más tiempo. Esta técnica se asemeja a un virus en la web, ya que se utiliza de manera subconsciente para manipular el comportamiento de los usuarios.

En resumen, aunque las redes sociales nos ofrecen una gran cantidad de beneficios, es importante ser conscientes de las oscuras realidades que se esconden detrás de ellas. Debemos estar atentos a los problemas relacionados con la libertad de opinión, el monopolio de las empresas GAFM, el dark ux y la hipercentralización de la web. Solo así podremos tener una experiencia en línea libre y auténtica. Y creo que hasta aqui podemos dejar la primera parte de este pedazo de rant que me he marcado... prometo abordar en la segunda parte esto de manera más técnica, palabrita.